Las personas mayores y las que tienen un bajo nivel de estudios tienen más posibilidades de encontrarse en paro de larga duración. Así lo indica el cuaderno “Capital Humano 122”, de Bancaza y el Instituto Valenciano de Investigaciones Ecnómicas (Irvie).
Los mayores de 55 años tienen más problemas para reincorporarse al mercado laboral y con respecto a los desempleados de entre 16 y 24 años, la diferencia es de una probabilidad un 20,8% mayor que los jóvenes. Esta situación de paro de larga duración también se da en aquellos que están menos preparados profesionalmente, los que tienen un nivel de estudios menor.
Por el contrario, los licenciados y diplomados tienen un 14% menos de probabilidades de sufrir un paro duradero que los que tienen estudios primarios. Concretamente esta cifra es del 14,5% en el caso de los licenciados y del 13,8 en el de los diplomados.
Una vez más, las mujeres se encuentran en una situación de discriminación laboral. El hecho de ser mujer incrementa un 2% las probabilidades de estar paro de larga duración, una diferencia que, aunque parezca pequeña, no debería existir.
Una buena formación, la llave contra el paro
El informe “Capital Humano 122” afirma que el empleo de larga duración reduce el capital humano del parado y, a su vez, sus posibilidades de encontrar empleo. Así pues se plantea la formación como algo primordial para reducir al menor tiempo posible el paro.
Una vez más, la formación es una herramienta imprescindible a la hora de encontrar un buen empleo. Y no sólo la formación que uno tenga es importante, sino que también es interesante una formación continua que ayude a no perder capacidades, mejorar profesionalmente y adquirir nuevos conocimientos que ayuden en la búsqueda de empleo.
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