Los técnicos de Formación Profesional que deseen acceder a la universidad deberán examinarse con una prueba de selectividad que les evaluará de hasta 4 asignaturas de bachillerato. El Ministerio de Educación señala que es la mejor solución para evitar el desequilibrio que existía anteriormente entre técnicos y bachilleres.
Los alumnos de Ciclos Formativos de Grado Superior deberán realizar la prueba voluntaria para subir nota, igual que los de bachillerato si quieren acceder a alguna de las titulaciones con las notas de corte más altas.
Para afrontar este examen deberán prepararse por su cuenta las asignaturas en cuestión que hace, como mínimo, dos años que no cursan.. Los centros que imparten las dos modalidades (FP y Bachillerato) ya han anunciado que organizarán clases intensivas de preparación. Pero los alumnos que cursan sus estudios en centros de FP solamente deberán estudiar ellos solos el material. El ministerio no ha contemplado que los institutos de bachiller realicen clases de repaso o apoyo a las que puedan acogerse estos estudiantes.
La nota que obtengan en esa prueba hará media con su nota final de FP, igual que se hace con los bachilleres con su nota de selectividad genérica.
Esta solución es la más sencilla para la organización de las pruebas que realizan las universidades, pero ha levantado un gran revuelo en el sector de la Formación Profesional. Aseguran que esta prueba deja en clara desventaja a los estudiantes que cursan un ciclo de grado superior.
Las autoridades afirman que en principio no tiene porque haber problema puesto que las materias de las cuales se examinan no les son extrañas, pues ellos las cursaron en su bachillerato y solo deberán refrescar conocimientos.
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