Montártelo por tu cuenta es el sueño de más de uno. Aunque sean muchas las ventajas las que saltan a la vista al abrir tu propia empresa, como ser tu propio jefe, cuando está cerca el momento de poder convertirte en freelance, debes tener en cuenta 10 puntos importantes que, Muypymes y Freelance Fólder, creen que pueden ayudarte a decidir si quieres ser o no en freelance.
1. Cuando se empieza un negocio como freelance, se cuenta con la ventaja de que el coste inicial es inferior al de poner en marcha otro tipo de negocio. Por ejemplo, no se pagan franquicias, ni se alquila oficina, ni tampoco hay necesidad de contratar a nadie, por lo que se reducen los costes.
2. Para ser un buen freelance es fundamental que sepas vender. Tener ciertas habilidades comerciales es muy importante para que el negocio tenga éxito. Sé realista, sin ventas, no hay negocio.
3. Por otro lado, es necesario que los trabajadores actualicen sus conocimientos de manera continua, pero esto es especialmente relevante para un freelance. Debes dominar tu campo de acción y estar al día de todas las novedades que se producen en tu sector. De ello depende que desarrolles bien tu trabajo, puedas especializarte o simplemente diferenciarte de la competencia.
4. Es importante formar parte de una comunidad online bastante activa. Puedes reunirte con ellos a través de foros, webs especializadas, grupos sociales, blogs. Formar parte de esta comunidad, te puede ayudar a mejorar como profesional, sobre todo porque refuerza el punto anterior del que hemos hablado.
5. A la hora de establecer una tarifa por el trabajo, existen diferentes factores que debes tener en cuenta y que complican el hecho de determinar cuánto debes cobrar: las habilidades, el reconocimiento de la comunidad, la competencia o la experiencia.
6. Muchas personas cuando eligen hacerse freelance es porque piensan que al ser ellos sus propios jefes, no van a depender de nadie. Pero, lo que no tienen en cuenta es que ser tu propio jefe puede suponer que seas mucho más duro contigo mismo de lo que sería otra persona. De hecho, puede que el nivel de autoexigencia y responsabilidad a los que te vas a someter supere al que tenías en tu empresa.
Por otro lado, a partir de ahora, el cliente es tu jefe: en ocasiones puede ir bastante bien, en otras, puede ser realmente un martirio.
7. Las redes sociales se han convertido en una herramienta fundamental para que te des a conocer. Puedes impulsar tus venta, establecer una relación más directa con tus clientes y posibles clientes, por lo que, ¡no las dejes de lado!
8. Tengas o no tengas clientes, sea mucho o poco el nivel de trabajo que tengas, no olvides que para poder tener éxito al llevar tu propio negocio, debes ser autodisciplinado y privarte de más tiempo de descanso del que podías disfrutar siendo un asalariado.
9. Otra diferencia respecto al trabajo tradicional, consiste en que a partir de ahora el mercado no sólo se centra en nuestra ciudad o país, sino que tus clientes potenciales se encuentran en cualquier parte del mundo.
10. Finalmente, el hecho de tener menos tiempo libre es otro tema para tratar. Por un lado, seguramente te verás obligado a trabajar aunque estés enfermo o no podrás disfrutar de los puentes tanto como quisieras. Por otro, necesitarás tiempo para gestionar correctamente el tiempo. Debes tener en cuenta que cuando eres freelance el tiempo deja de ser tuyo y pasa a ser del cliente.
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