Así lo indicó Antonio Troscoso, director de la Agencia de Protección de Datos de Madrid, durante una jornada celebrada el pasado martes 25 de noviembre para formar a los centros públicos en materia de protección de datos. “Si los padres de un adolescente mayor de 16 años no pueden acceder al historial clínico de su hijo ni conocer datos relativos a su salud siempre que no se trate de un caso grave, cabe interpretar, por analogía, que tampoco deben tener acceso a sus calificaciones”, arguyó.
No obstante, Troscoso reconoció que aún “no existe una norma. Se trata de una interpretación a partir de la actuación en el ámbito sanitario. Si no pueden acceder a información sobre la salud de los hijos, mucho menos a datos académicos, que tienen menos relevancia”. El director de la APDM recordó a los asistentes que “la legislación favorece cada vez más la autonomía de los menores y les otorga más capacidad para ejercer sus derechos. No podemos olvidar que la Ley general de protección jurídica del menor recoge ese derecho a la intimidad frente a los padres”.
Durante el encuentro, que reunió a directores, docentes e inspectores de los centros públicos de enseñanza de la Comunidad de Madrid, se abordaron otras cuestiones que pueden generar conflictos con la Ley Orgánica de Protección de Datos (LOPD), desde la difusión de fotografías de actividades escolares hasta el intercambio de mensajes de móvil entre profesores y alumnos.
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