Estudiar chino: la puerta al mercado asiático

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El chino es uno de los idiomas más hablados del mundo, con más de 1.400.000 hablantes. Este país asiático tiene todo los números para convertirse en la primera potencia mundial en menos de diez años. Por eso los expertos creen que este dato  no parará de aumentar a corto plazo. Una de las razones es que China quiere reemplazar a EE.UU. como principal motor económico del Mundo, por eso el idioma chino jugará un papel muy importante en la comunicación de los negocios.

Además el idioma chino se está extendiendo por todo el continente Asiático. En países como Corea, Japón y Vietnam ya se estudia el idioma chino como lengua extranjera. Por eso, aprendiendo chino podremos desenvolvernos con soltura por todo el continente.

El idioma chino se ha convertido para muchos en una buena salida de la crisis.

Desde que China se convirtió en uno de los máximos exponentes de la economía mundial, la demanda de profesionales con habilidades en el idioma chino no ha dejado de crecer.

Aprender chino nos puede abrir las puertas de muchos trabajos, no solo en China, sino en otros muchos países en los que las empresas chinas tienen sede.

Para muchos también, se ha convertido en una buena manera de diferenciarse del resto.

No todo son ventajas pues el idioma chino es uno de los más difícil de aprender. Contiene cerca de 50.000 caracteres, muchos vocablos e infinidad de sinónimos y refranes.

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Si quieres estudiar chino, estos son los aspectos más importes que debes conocer antes de ponerte por la labor:

–       Chino mandarín: es el idioma oficial de China. Con más de 5.000 años de antigüedad, el chino mandarín aún perdura como la principal lengua en todo el territorio. Pero no solo se habla este idioma, pues este país consta de unas 56 lenguas sin contar los dialectos. Esto se debe a que el idioma chino es muy creativo y está en constante evolución.

–       Fonética: el chino es tonal, es decir, según la pronunciación cada sílaba puede adoptar un significado diferente. Su abanico de sonidos consta de 406 sílabas, más cuatro tonos de combinatoria. La buena fonética es vital, pues puede variar el significado de las palabras y ocasionar confusiones.

–       Gramática: la gramática china no es muy compleja comparándola con la fonética. Las frases, igual que en nuestro idioma, constan de sujeto, predicado, verbo y complementos. Los verbos no se conjugan y no existe concordancia de género y numero.

En España cada vez surgen más escuelas de idiomas o cursos formativos de chino. Solo es cuestión de tiempo  que el idioma chino sea de obligatorio conocimiento y, por eso aprenderlo ya, puede ser una ventaja.

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