La educación está cambiando con la sociedad y los nuevos retos que presentan las nuevas Tecnologías de la Información y la Comunicación. Sin duda, una formación que no se adapta a sus estudiantes no es una buena formación. Hoy queremos dar un repaso a los tipos de modalidades de educación no presencial que podemos encontrar en el mercado, para saber si decantarnos por una formación online, virtual o a distancia.
Seguramente habrás pensado que todas la modalidades de estudio no presencial son iguales, pero esto es incorrecto por eso te explicamos a continuación en qué consiste cada una y sus ventajas.
La formación online:
La educación online es la más parecida a la educación tradicional o presencial pero valiéndose de las nuevas tecnologías. ¿Por qué decimos esto? porque a diferencia de las otras modalidades no presenciales la clase sí es tiempo real y el alumno debe asistir a clases en vivo o seminarios planteados por el docente donde coincide con el resto de sus compañeros.
En realidad es como una clase normal, solo que la institución debe contar con los suficientes recursos o plataformas tecnológicas para que se pueda llevar a cabo el visionado de las clases.
La principal ventaja es la facilidad de comunicación con el docente y otros alumnos, ya que es tiempo real y el alumno no tiene que esperar para recibir la respuesta. Y como inconveniente el horario al que está atado el alumno durante la realización del curso.
La formación virtual:
Seguramente la formación virtual será una de las que más se basa en la integración de las diferentes tecnologías. Los alumnos tienen acceso al material de las clases y lo pueden revisar y reproducir cuándo y dónde quieran, sin necesidad de tener que coincidir con el docente y el resto de alumnos durante el desarrollo de las clases. El feedback se realiza mediante plataformas educativas que incluyen foros y contacto con el resto de participantes.
La principal ventaja es la libertad de horario, y como inconveniente es que los tiempos de respuestas son variables dado que no tienen porque estar conectados otros alumnos o el profesor a la misma hora que el estudiante.
La formación distancia:
La formación a distancia, a diferencia de las anteriores, puede ser totalmente ajena a las nuevas tecnologías sin necesidad de que los estudiantes requieran conocimientos tecnológicos previos.
Normalmente la formación se caracteriza por la entrega de los materiales educativos en formato físico (folletos, libros, o material multimedia a través de CD, US, etc). Y el alumno se va preparando por el mismo las clases y el temario por el mismo. Por su puesto puede tener feedback con el docente ya sea por el canal email o por teléfono.
La ventaja es que tú eres el principal agente del aprendizaje, sin ningún tipo de control rutinario por parte del docente hasta la prueba final. La desventaja es que requiere un fuerte compromiso por parte del alumno dado que el feedback con el docente es mucho menor.
Sin duda cualquier tipo de educación a distancia requiere un compromiso por el alumno, para que no caiga en la desmotivación. Pero sin duda, es una método efectivo para las persona que necesitan combinar su educación con el trabajo o cualquier otra actividad. Lo importante es marcarse unos objetivos e ir a por ellos.
¿Realizarías una formación no presencial? Personalmente yo he realizado formación en las dos primeras modalidades y la verdad es que me han parecido muy útiles. Cada resenta una fortaleza distinta, pero sin duda, si tuviera que decantarme por una la formación virtual es la que permite una mayor flexibilidad y capacidad de compaginarla al no tener horarios. Ahora te toca a ti, cuéntanos qué te han parecido las modalidades de educación no presencial y si conoces a alguien que esté dudando compartelo para que compare.

Emprendedor tecnológico en serie y business angel. Socio fundador de Green Living. En el pasado fundé la Escuela Virtual de Empresa (UB y Grupo Planeta) e IEBS Digital School. Experto en Transformación Digital, Growth Marketing, RPA y Automatización.